Primero fue Martínez, con su infalible
zurda desde el punto de castigo, y remató la faena Álvarez, en una definición
exquisita, ávida de paciencia. Así fue el partido ante el Conquense, de Carlos
a Carlos y a pensar en el Racing, que es lo que toca. Una victoria tibia, sin
la brillantez que pretende este Leganés, pero con el agradable sabor del
triunfo. Un domingo, sin embargo, que puso de manifiesto el indiscutible fondo
de armario de los pepineros.
Para muestra Luis Ruiz, en el lateral
izquierdo, o Jorge Alonso y Valleros, en lugar del lesionado Martín y el
sancionado Eraso. Fue otro Lega, con otras variantes, y eminentemente inspirado
en guardar para el miércoles. La cita del Racing en Copa tira y mucho; y
Garitano ha insistido a la plantilla en este sentido. Apareció la versión más
práctica de un Leganés que, pese a jugar con el freno de mano ‘echao’, resolvió bien para impedir
imprevistos en los últimos minutos.
Salió Pírez, que comienza a desprender un
aroma ‘benzemaniano’, y dejó su sitio
a un Carlos Álvarez vital, objeto del penalti que trasformó su tocayo Martínez,
y artífice del segundo. Media hora del ‘guaje’ que arregló la insípida primera
mitad, y sobre todo, allanó la empresa de este miércoles. Será con honores, horario
‘Champions’ incluido, el padre de todos los sueños, la puerta del Camp Nou o el
Santiago Bernabéu. Déjense llevar, si total ganamos lo mismo. Únanse a la
guardia de Butarque.
1 comentario:
todos el miércoles a Butarque a unirnos a la guardia. que no siempre se juega un partido asi, con aliciente a un equipo champions o de europa league. casi nada...
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