lunes, 24 de marzo de 2014

La exigencia del líder

          

A mi izquierda, en el Cerro del Espino, un seguidor del Lega llamó 'cagón' a Garitano en un par de ocasiones, incapaz de comprender la tardanza en hacer los cambios por parte del entrenador del Lega. Tampoco entendía la presencia de Álvaro García en el once titular, ni que Rubén Rivera no esté pudiendo demostrar su valía en los cuatro ratos que juega. Hete aquí: borbotones de impaciencia, kilos y kilos de la inaguantable exigencia a la que siempre se somete al líder. Lo más llamativo es que --ni tan siquiera el primer puesto-- contenta a una afición que patalea con la mortadela porque conoce bien el sabor del caviar. La comparación es algo barata, pero me sirve.


Y mucho, porque la afición del Lega no es eso. Sería injusto que estos tres párrafos habituales de cada lunes reflejasen sólo ese sentir cuando el pensamiento general es de agradecimiento a una plantilla infinita. Nadie dijo que el objetivo tenía que ser el primer puesto, ni tan siquiera nadie prometió el 'play-off' a final de temporada. Diez jornadas sin perder y récord histórico de imbatibilidad. Todo esto, a falta de siete semanas para el bocinazo final, lo ha propiciado el mismo equipo al que --el seguidor de mi izquierda-- gritaba como si ocupase la decimocuarta plaza. Todo a su tiempo, aunque se pierda la condición de líder y aunque esto conlleve escoger un camino más largo. 

Con esto, el Lega no mereció perder ante el filial rojiblanco en un partido que se decidió con el golazo de Aquino. El libre directo, que tocó Dani Barrio, resolvió un encuentro con más peso de los pepineros, pero sin la profundidad necesaria para generar ocasiones claras de gol. Sólo Abel Suárez, con un lanzamiento al palo, rompió el guión en la primera mitad, jugadón de Velasco, al margen. Después, y tras la buena noticia del regreso de Carlos Martínez, llegaron los infructuosos balones al área y la improvisada defensa de tres, la cual no creo que fuese un mal experimento de cara al futuro. El Lega crece, incluso en la derrota, y digo que crece porque lunes tras lunes, y ya van tres, sigue siendo el dueño de la casa.

2 comentarios:

Octavio dijo...

Si se hace bien hay que decirlo, pero si se hace mal tambien.
Quizá el tono que pudo emplear ese aficionado no fuera el mas correcto, pero no creo que la critica sea mala.
Si se quiere conseguir algo hay que ser ambiciosos y el planteamiento de los ultimos partidos quiza no sea el mas correcto.

David Aguilera dijo...

Estoy cien por cien contigo, claro que sí. Se trata de criticar cuando las cosas no van bien y de ensalzar lo positivo para que se siga haciendo, pero ¿ahora no vamos bien? A todos nos gustaría ser líderes con un colchón amable y llegar a las dos últimas jornadas sin nada en juego, pero esto es muy complicado...

Entiendo también la frustración de no haber ganado estas tres semanas, pero en ningún caso como si estuviésemos en el Bernabéu o en el Calderón. La exigencia de este líder es distinta al resto.

Gracias por tu comentario