Nadie podrá discutir que el Lega ha tocado fondo. Distinguido como colista, el conjunto pepinero está en la peor situación que nunca habría imaginado. Quedan ocho jornadas y la temporada se ha teñido de negro cuando estaba prevista para los fuegos artificiales. Nada ha salido como se diseñó y nada puede ser peor que ser el último. Ayer, en Valdebebas, el Castilla dio la puntilla en un partido que fue de corrientes, un partido en el que Víctor volvió a jugar desde el banquillo ¿Por qué no sale el '21'? se preguntaba el narrador de Marca Televisión...
Y lo que me más me duele es que el fútbol sea injusto con el bueno de la película, con quien hace las cosas 'como Dios manda' (perdonen mi recurrencia a lo divino). Ya expresé mi desgana, con motivo de los repetidos enfrentamientos entre Barcelona y Real Madrid, a que los blancos acabasen con el 'reinado' culé. Mi amor a este deporte me lleva a pensar que un equipo menos valiente, que mete el dedo en el ojo y que justifica los medios para alcanzar el fin, no merecía frenar la brillante trayectoria de los de Pep Guardiola. Igual me pasa con el Lega.
Dejando al margen la cuestión futbolística, ni Felipe Moreno ni Victoria Pavón merecen ver castigada su gestión con un descenso a Tercera. Me consta que el máximo accionista ya le ha visto las orejas al lobo. Ni la llegada de José María Rico (2 puntos de 18 disputados) ha servido para devolver las aguas a su cauce y el vestuario es un polvorín fallero que no tiene parangón si echamos la vista atrás en los últimos años.
Y pese a todo, todavía hay quienes defenderán la derrota de ayer como una digna actuación. La expulsión de Ramón Bláquez, que hizo un mal partido como toda la defensa --a excepción de Azcárate--, restó valor a los de Toril. El 2-0 no fue suficiente por el afán de Víctor, que botó una falta al área y David López acabó por recortar distancias. La tuvo Rubén Navarro, a quien se le anuló un gol que hubiera sido el empate. Pero no se olviden de los dos largueros de Joselu. Esto huele mal, este blog no se creó hace cuatro años para escribir el descenso del Lega a Tercera. ¡Buf! Nos vemos el domingo.
1 comentario:
El club ha tocado fondo, pero se puede caer más bajo. Si en Tercera División se mantiene la misma línea deportiva, pues adiós y a apoyar a otro club. Que hay muchos en Madrid que están haciendo las cosas bien, y la gente puede ser de Leganés pero no es masoquista.
Sobre "merecimientos", creo que quien no se lo merece es Victoria Pavón. La pobre está sufriendo muchísimo por culpa de un cúmulo de cosas en las que no tiene la culpa. Está en un cargo "decorativo" y recibe todos los palos cuando no lo merece. En cambio, a su marido Felipe Moreno le pueden dar por "donde amargan los pepinos" (nunca mejor dicho), porque no ha sabido gestionar su propia empresa. Un club de fútbol no es un restaurante o un bloque de pisos de Brasil; necesitas saber del deporte, no te bastan con los contactos. Y tampoco basta con que esté saneada cada más.
Darle palos al inútil de Paco Belmonte o a los mingafrías de los futbolistas es normal y correcto. Pero, ¿quién es el último que los contrata? Pues eso.
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