lunes, 26 de noviembre de 2012

Dioni de mi vida


Tiene narices la cosa. El Lega no había ganado lejos de Butarque en toda la temporada y lo hizo ayer, en El Helmántico, campo precioso del fútbol español. Con sabor inglés, cerquita del césped, hecho por y para el espectador. Allí, el Lega, se hizo grande y dio un paso de ilusión. ¿A quién queréis para el play-off? se preguntaba la afición pepinera en tono de guasa al término del partido. Triunfo de empaque, de los que salen en la prensa de aquí y de allí, de los que hacen buena patria de este Club Deportivo Leganés.

Se trataba de no caer fulminados ante uno de los gallitos de la categoría, equipo de Segunda y con pasado reciente en Primera. Histórico por sus méritos, también encabeza la lista de favoritos para estar en la lucha por regresar al fútbol profesional la próxima campaña. Contra todo esto, y contra Raúl Moreno, también luchó el Leganés, ordenado atrás, compacto, sobrio y contundente, letal en los metros finales. Ahí apareció Dioni, resolutivo como pocos, lagartija entre montones de piernas, inteligencia descarada. Eso en este Lega supone destapar el tarro de las esencias.

Los charros, con Piojo al mando, pudieron haber cambiado el rumbo a los cinco minutos, pero Igor no acertó con la errónea salida de Falcón. Aicart contuvo bien el centro del campo y Carlos Martínez terminó exhausto. El Lega quiso y pudo, demostrando que la propuesta debe pasar por acumular la pelota en la medida de las posibilidades blanquiazules. La presencia de Nico Cháfer, en el once inicial, permitió a los pupilos de Pablo Alfaro armar a su afición de ilusión, hacerla rebosar en un domingo mágico en el que Dioni fue como Iniesta. Perdonen la exageración, pero nos hacía falta. ¡Dioni de mi vida! 

2 comentarios:

Jorge dijo...

David estuvo genial eh?? lo de sabor inglés yo tb lo pensé con la llovizna esa y todo...la prox te vienes de "after" con nosotros...jejeje.

David Aguilera dijo...

Buenas Jorge,

El Helmántico fue espectacular, me encantó estar tan cerca del césped. Eso lo echo de menos en Butarque...

Al siguiente viaje hay que hacer noche allí, claro que sí! jajaj.

Un abrazo señor!