El folclore del Sur de Madrid respira hostilidades cada vez que se enfrentan Leganés y Getafe. Así pasa con Betis y Sevilla; Oviedo y Sporting y con Murcia y Cartagena, por poner tres ejemplos. Ustedes ya me entienden. El fútbol es más fútbol si existe una constante comparación con el vecino, si los domingos te quitan argumentos que servían la semana anterior, si el fuera de juego lo distingue el canto de un duro. Aquel concepto que algunos tertulianos de los años 90 se encargaron de bautizar como la 'salsa del fútbol', es decir, todo lo que alimenta el debate meramente balompédico.
En esas se encuentra el Lega, castigado a jugar el 'miniderbi' contra el filial de su máximo rival. Un equipo que no había perdido nunca en Butarque, manda narices. Sin embargo, ayer la historia cambió a golpe de timón con un testarazo de Fer Ruiz en el tiempo añadido. ¿Se imaginan mejor guión? Un sensacional remate de cabeza que sirvió para tumbar la estadística y reventar de éxtasis los más de 4.000 corazones que poblaron las gradas del Municipal. Un momento de esos que recordará la afición pepinera durante mucho tiempo. Centro de Carlos Martínez y gol de 'Chenan'.
El '17', desaparecido hace poco más de un mes, ha vuelto a encontrar el tono desde el banquillo. Surgió como una exhalación en Majadahonda (en el gol de Batres), marcó el primero ante el Guijuelo y desarboló el mal fario contra los getafenses. Para colmo, la victoria trajo consigo la derrota del Oviedo y Fuenlabrada; y el empate del líder en Zamora. El Leganés, que prefirió reservar a Dioni hasta el minuto 50 por molestias en el pie, ya es segundo con cinco puntos de colchón sobre el quinto. "Hoy hemos vuelto a sonreír, disfrutemos de esto". Hagamos caso a Pablo Alfaro.
Foto Fer Ruiz: Vanesa Corchado
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