Un volantazo a tiempo

Así ha enderezado el Lega el rumbo esta temporada, a golpe de volantazo tras las derrotas en Huesca y frente a la Real Sociedad. ¿La mejor medicina? Los goles ante el Sestao, el pasado miércoles, y el de ayer ante el Atlético B. Justo a tiempo para no caer en el lado equivocado de la clasificación, pero sobre todo para no cuestionar el proyecto ideado por Asier Garitano, que todavía es un recién nacido. Ayer, ante el filial rojiblanco, se ganó con un penalti que sólo vio el árbitro, pero se ganó. A fin de cuentas, este árbitro estaba en la lista negra de la afición pepinera desde hace sólo unos meses.

Pulido Santana, el mismo que dirigió aquél fatídico 'play-off' ante el Leida, cuya lesión convirtió el partido en un infarto interminable. Así que la grada no tuvo queja ninguna después de que Mikel Santamaría fuese expulsado a los 20 minutos por un codazo que no vio nadie. Es decir, había caldo de cultivo. Para colmo, Carlos Martínez se lesionó un rato antes y su vacío pronto se notó en el costado izquierdo. No existió el fútbol que sedujo al comienzo, pero hubo brega, pelea y batalla, la misma que no le puede faltar a un Lega que empieza a asomar la cabeza.

No defiendo los 'golpes sobre la mesa', ni aquellos cretinos que insultan al jugador que lleva su misma camiseta. Ayer, uno de los que más pitos recibió hace siete días, fue el mejor allá donde jugó. Fran Moreno, el autor del penalti, repitió fortuna y se ganó el aplauso de Butarque. También jugó Candela, que se está haciendo dueño del centro del campo, y Velasco, que relevó a Chenan en le derecha. Siguen en la enfermería Postigo, Alberto Martín y Pírez, a los que se suma el tocado Martínez y el sancionado Santamaría. Ya llegará el próximo domingo, de momento hay ganas de comprar el periódico, de releer la clasificación y de soñar haciendo cuentas con los dedos de la mano.  

FOTO: CDL/Fran Moreno pelea un balón