Otro domingo en Butarque y otra victoria. El Lega empieza a malcostumbrar a su afición, que hace lo que sea por verle en directo. El pasado sábado, con el Real Madrid de fondo, Butarque presentó un aspecto maravilloso. Tanto o más que su Lega, resplandeciente, valiente, inteligente, que aprende a no necesitar grandes alardes para llevarse los partidos. En esta ocasión su víctima fue el filial del Barcelona, un equipo plagado de talento pero falto de experiencia en una categoría tan puñetera como es Segunda División y ahogado en una terrible crisis de resultados.
Velasco y Eraso fueron los goleadores en dos acciones de rechace, en segunda jugada, aprovechando un disparo de César Soriano y un remate fallido de Fran Moreno, respectivamente. Un botín trabajado en el centro del campo, donde la pareja Eraso-Alberto volvió a dar un paso al frente. De igual manera que el '10' pepinero, el que más clase desprendió ante las jóvenes promesas del Barça en su nuevo cometido de fijar a los centrales. Con tranquilidad, sin la presión de otros partidos, terminó el Lega la vigésima jornada, la penútima de la primera vuelta.
Y, haciendo cuentas, pues ni tan mal ¿no? El Lega es el sexto mejor equipo de la categoría como local, sólo Betis, Valladolid y Las Palmas han ganado más partidos que él. Si sólo existiese una clasificación con estos partidos, los pupilos de Garitano estarían a un punto del ascenso. De seguir así, con un par de triunfos lejos de casa, será suficiente para guardar la categoría. De momento, los refuerzos de Chuli y Marc Bertrán no hacen más que alimentar la ilusión. Butarque como sinónimo de vida y este Lega, que es fiel creyente del partido a partido, es capaz de todo.
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